jueves, 24 de abril de 2008

Yo no lo ví así

Dicen periodistas, analistas y aficionados que el Manchester United de ayer fue una decepción. El equipo inglés, a lo largo de toda la temporada, ha desarrollado un fútbol rápido, eléctrico y vertical. Fuerte en defensa pero valiente en el área rival, con delanteros de mucha calidad y gol. Es el líder de la Premier, está en semifinales de la máxima competición continental con total merecimiento y, lo mejor sin duda, posee al mejor jugador del mundo, Cristiano Ronaldo. El portugués está realizando una temporada de escándalo y sus números son, sin discusión, de Balón de Oro y de Fifa World Player. Sin embargo, tales reconocimientos individuales no llegarán de no ser hombre en la Copa de Europa. Pero él lo sabe. Tiene fijado la final de Moscú en la frente. Sueña con la orejones y, por qué no, jugar en España.

No obstante, en el día de ayer, no se vio nada de lo citado en el anterior párrafo. O eso afirma la opinión pública futbolera. Enfrente del Barça no hubo ningún equipo ofensivo sino al contrario, un conjunto muy defensivo. En ningún momento se vio la verticalidad que tanto caracteriza al United. Parecía como si en vez de Ferguson, en el banquillo visitante se hubiera sentado el mismísimo José Mourinho. Y Cristiano, a parte de fallar una pena máxima, se tomó el partido como si de un amistoso se tratara. Esto es, con tres o cuatro detalles de la calidad que tiene, pero no más. Sin motivación y con aire de divo. Vamos, el tío estaba en un amistoso. O sea. Que ni el Manchester jugó al ataque, ni metió miedo Ronaldo, ni nada de nada. Una patata en toda regla. El United les resultó un fraude, un timo.

Pero mire por donde, que yo no ví ningún chasco. Es cierto que no ví el juego típico del Manchester United -ni yo ni nadie- pero no por ello resultó ser un fracaso. Es más, el conjunto inglés jugó como un equipo del siglo XXI. Los diablos rojos salieron conscientes de que las eliminatorias duran 180 minutos y no 90, y de la importancia que supone no encajar un gol. El Barça, para bien o para mal y más en su campo, siempre tiene la pelota. Y ante eso, o se le quita el balón o se le espera. Hasta el momento nadie le ha quitado la pelota, sino al revés, han habido equipos que le han esperado y le han dado soberanas lecciones -el Real Madrid, el Villareal, y el Chelsea, el año pasado, son ejemplos-. Haber jugado de manera distinta hubiera propiciado que los culés estuvieran más liberados del marcaje, más contragolpe y, por consecuencia, más posibilidad de anotar un gol. Ayer el Manchester defendió bien, taponó a Messi e intentó que los mediocentros culés no conectaran con los delanteros. La pena fue no marcar un gol. Cristiano tuvo la única ocasión. Y falló. Con él es lo único en lo que estoy de acuerdo con los demás.

Todo despejado para Old Traffor, donde, ahí sí, en un campo de dimensiones más reducidas, la afición de su lado y el Barça con mucha presión, el Manchester jugará como todo el mundo esperaba. Y más le vale a Miltio que no tiente más a la diosa fortuna. San Jordi no estará presente el 29 de abril.

1 comentario:

Chechu dijo...

Bueno, llego un poco tarde al post pero estoy totalmente contigo. En la ida se vio a un Manchester que hizo lo que debía, esto es, jugar atrás y esperar a la contra porque vio que no tenía su día para despegar el juego ofensivo. Además, en Europa el United es muy conservador y a menudo suele hacer esto.

SAludos

PD: Me gustaría un intercambio de links